Publicado el mayo 15, 2024

El error fatal es intentar compensar tu falta de experiencia; la estrategia ganadora es hacerla irrelevante.

  • Los reclutadores no buscan un pasado laboral, sino señales de potencial futuro: adaptabilidad, resolución de problemas y capacidad de aprendizaje.
  • Tu CV y perfil online deben estar optimizados no para un humano, sino para un robot (ATS) que filtra por palabras clave y formato.

Recomendación: Deja de enviar CVs masivamente. Invierte el 80% de tu tiempo en decodificar la oferta y el 20% en adaptar tu candidatura para ser la respuesta obvia a esa necesidad.

Te enfrentas al muro. Cada oferta de «primer empleo» pide dos años de experiencia. Es la paradoja laboral que frustra a miles de recién graduados en España: necesitas experiencia para conseguir experiencia. El consejo habitual es predecible: «resalta tus estudios», «muestra entusiasmo», «habla de tus trabajos de verano». Son consejos bienintencionados, pero inútiles en un mercado competitivo. Forman parte del ruido de fondo que los reclutadores hemos aprendido a ignorar. Porque la verdad, desde mi lado de la mesa, es que no me importa que no tengas experiencia. De hecho, a veces lo prefiero.

Contratar a un junior no es cubrir un hueco, es una inversión a futuro. No buscamos a alguien que sepa hacer el trabajo desde el día uno, sino a alguien con el potencial para transformarlo en dos años. El problema es que la mayoría de los candidatos no saben cómo «señalizar» ese potencial. Se enfocan en rellenar el vacío de la experiencia con información irrelevante, en lugar de demostrar las competencias que realmente importan.

¿Y si la clave no fuera disimular tu falta de experiencia, sino usarla a tu favor? Este no es otro artículo con consejos genéricos. Es una guía desde dentro, la de un reclutador de talento joven que busca potencial, no pasado. Vamos a desmontar el proceso de selección para que entiendas la lógica detrás de cada etapa. Te enseñaré a decodificar lo que buscamos, a optimizar tu perfil para ser visible, a elegir el entorno que acelerará tu carrera y, sobre todo, a transformar cada pregunta de la entrevista en una oportunidad para demostrar que eres la apuesta más inteligente que una empresa puede hacer.

Para guiarte en este proceso, hemos estructurado este manual en varias etapas clave. Exploraremos desde cómo demostrar tus habilidades sin tener un historial laboral hasta cómo sortear los filtros automáticos que desechan tu currículum antes de que un humano lo vea. Prepárate para cambiar las reglas del juego.

Comunicación, adaptabilidad o resiliencia: qué ejemplos concretos convencen al entrevistador?

Cuando un reclutador te pregunta por tus «habilidades blandas», no quiere oír una lista de adjetivos. Decir «soy proactivo y trabajo bien en equipo» es una frase vacía. Lo que busco son pruebas, evidencias. Tu misión no es describirte, es contar una historia que demuestre esa cualidad en acción. El mercado laboral español lo tiene claro: según un informe reciente, casi el 44.6% de las competencias más valoradas en el sector digital son, precisamente, las soft skills. Esto significa que tu capacidad para comunicarte, adaptarte o resolver problemas vale casi tanto como tus conocimientos técnicos.

Entonces, ¿cómo lo demuestras sin experiencia profesional? Usando tu experiencia vital. Un proyecto universitario complejo, un voluntariado, la organización de un viaje en grupo o incluso un reto en un videojuego online. Cualquier situación donde te enfrentaste a un problema y lo resolviste es un campo de pruebas válido. La clave es estructurar tu respuesta para que sea un caso de estudio en miniatura. Para esto, los reclutadores amamos una herramienta: la metodología STAR (Situación, Tarea, Acción, Resultado).

Imagina que quiero evaluar tu capacidad de adaptación. En lugar de decir «me adapto fácil», cuéntame esto: «En un proyecto de la universidad (Situación), nuestro grupo tuvo que cambiar a mitad del semestre a un nuevo software que nadie conocía para cumplir los requisitos del profesor (Tarea). Mientras mis compañeros se quejaban, yo tomé la iniciativa de ver tutoriales durante un fin de semana y preparé una mini-guía para el equipo (Acción). Gracias a eso, no solo entregamos a tiempo, sino que obtuvimos una de las notas más altas por el uso avanzado de la herramienta (Resultado)». Esto no es una opinión, es un hecho. Has demostrado adaptabilidad, iniciativa y colaboración sin mencionar una sola vez un contrato de trabajo.

Prepara tres de estas historias STAR antes de cualquier entrevista, cada una enfocada en una competencia diferente (liderazgo, resolución de conflictos, comunicación). No las memorices, interioriza la estructura. Así, cuando te pregunte «Háblame de una vez que…», no dudarás. Tendrás un arsenal de pruebas concretas que hablan de tu potencial mucho más alto que cualquier línea en tu CV.

Por qué tu perfil está invisible para los reclutadores aunque tengas un buen título?

Tienes un título brillante, quizás con honores. Has invertido años en tu formación. Y sin embargo, aplicas a docenas de ofertas y solo recibes silencio. La razón es simple y brutal: en el 2024, tu título no es la puerta de entrada. Tu visibilidad digital sí lo es. Antes de leer tu CV, es muy probable que te haya buscado en LinkedIn. Si tu perfil es un esqueleto (sin foto, con un titular genérico y sin actividad), para mí, prácticamente no existes.

El primer filtro no siempre es humano. Pero cuando lo es, es un reclutador haciendo una búsqueda booleana en LinkedIn con palabras clave como «marketing digital AND SEO AND junior AND Madrid». Si tu perfil no contiene estos términos, eres invisible. Un titular como «Recién graduado en Administración de Empresas» es un desperdicio de espacio. Uno como «Especialista Junior en Finanzas | Análisis de Datos y Reporting | Buscando oportunidades en el sector fintech» es un imán para reclutadores. Estás diciendo quién eres, qué haces y qué buscas.

La optimización de tu presencia online es tu primera tarea como profesional. Como señalan los expertos, no se trata solo de tener un perfil, sino de convertirlo en una herramienta activa de posicionamiento.

Estudio de caso: La estrategia de visibilidad en LinkedIn

Según la consultora Page Personnel en España, la optimización del perfil de LinkedIn tiene un impacto medible. Recomiendan combinar el cargo con la especialidad en el titular, incluir logros cuantificables (incluso académicos, como «Lideré un proyecto que mejoró la eficiencia de un proceso en un 30%») y usar las palabras clave de las ofertas a las que aspiras. Las estadísticas son claras: un perfil con una foto profesional no es una opción, es una necesidad, ya que puede recibir hasta 14 veces más vistas y 36 veces más mensajes de reclutadores. Actuar sobre estos puntos es el primer paso para dejar de ser invisible.

Sin embargo, la optimización es solo la mitad de la batalla. La estrategia más avanzada es saltarse la cola. En lugar de aplicar a través de un portal de empleo, donde compites con cientos de personas, identifica al «hiring manager» (el director del departamento que contrata) en LinkedIn. Aquí es donde una mentalidad de «hacker» se vuelve crucial.

El objetivo no es ‘ganar’ al robot, sino evitarlo. La estrategia definitiva es encontrar el email directo del hiring manager.

– Expertos en selección digital, Análisis de estrategias de búsqueda de empleo en España 2024

Encontrar este contacto y enviarle un mensaje directo, corto y personalizado («Hola [Nombre], he visto la vacante de [Puesto] y me fascina vuestro enfoque en [mencionar algo específico de la empresa]. Mi experiencia en [proyecto universitario relevante] creo que podría aportar valor. Adjunto mi CV por si fuera de interés.») te posiciona por delante del 99% de los candidatos. Has demostrado iniciativa, interés real y has hecho mi trabajo más fácil. Esa es una primera impresión imbatible.

Gran consultora o startup ágil: dónde aprenderás más rápido en tus primeros 2 años?

La primera elección de empresa definirá tu trayectoria profesional. No se trata solo del logo en tu CV, sino del «capital de aprendizaje» que acumularás. Las dos rutas más comunes para un recién graduado en España son la gran consultora (pensemos en las Big Four) o la startup/scale-up tecnológica. Son dos universos con reglas, ritmos y resultados de aprendizaje radicalmente distintos. Elegir mal puede significar un estancamiento prematuro.

Una gran consultora te ofrece estructura. Aprenderás metodologías probadas, te rodearás de una red de contactos formal y prestigiosa y tendrás un plan de carrera predecible. Es una escuela de élite que enseña disciplina, rigor y a manejar la presión en entornos corporativos complejos. Sin embargo, la curva de aprendizaje, aunque sólida, puede ser lenta. Tu impacto en el producto final suele ser indirecto, ya que trabajas para un cliente, y la aversión al riesgo es alta, lo que limita la experimentación.

Contraste visual entre oficina corporativa tradicional y espacio de trabajo startup moderno

Por otro lado, una startup es el caos organizado. La curva de aprendizaje es vertical y acelerada. Un día estás analizando datos, al siguiente estás en una reunión con un cliente importante y al tercero estás ayudando a definir una nueva funcionalidad del producto. Desarrollas una mentalidad de «ownership» (sentido de propiedad) y aprendes a «fallar rápido» (fail fast), una de las competencias más valiosas en la economía digital. El crecimiento profesional puede ser meteórico y tu red de contactos, aunque más informal, es densa y está conectada al vibrante ecosistema emprendedor.

No hay una respuesta correcta, solo la respuesta correcta para ti. La siguiente tabla resume las diferencias clave para ayudarte a tomar una decisión informada, basada en un análisis comparativo de desarrollo de talento en el mercado español.

Comparativa de aprendizaje: Consultora vs Startup en España
Aspecto Gran Consultora (Big Four) Startup/Scale-up
Curva de aprendizaje Estructurada, metodologías establecidas Acelerada, aprendizaje caótico
Red de contactos Formal, prestigiosa, alumni network Informal, densa, ecosistema emprendedor
Cultura del error Aversión al riesgo, procesos definidos ‘Fail fast’, experimentación constante
Desarrollo profesional Carrera predecible, promoción lenta Crecimiento rápido, roles múltiples
Impacto en producto Indirecto, trabajo en cliente Directo, ownership del producto

Mi consejo como reclutador: si buscas una base sólida, prestigio y una carrera más lineal, elige la consultora. Si tu prioridad es aprender a la máxima velocidad, tener un impacto directo y no te asusta la incertidumbre, la startup es tu lugar. Los dos primeros años son para absorber conocimiento como una esponja; elige el entorno que más te empape.

El fallo de diseño que hace que los ATS (robots) descarte tu currículum automáticamente

Has pasado horas diseñando un currículum visualmente atractivo en Canva. Usas iconos, dos columnas y una tipografía elegante. Lo envías y… nada. El problema no es tu contenido, es el contenedor. La mayoría de las grandes y medianas empresas en España ya no tienen a una persona revisando cada CV que llega. Tienen un ATS (Applicant Tracking System), un software que actúa como primer filtro. Y a estos robots, tu precioso diseño les parece un galimatías indescifrable.

Los ATS no «leen» como los humanos. Analizan (o «parsean») el texto en busca de información estructurada: experiencia, educación y, sobre todo, palabras clave. Columnas, tablas, gráficos, imágenes o tipografías extrañas rompen este análisis. El robot no puede identificar dónde empieza la experiencia o termina la educación y, ante la duda, descarta tu perfil. Le asigna una puntuación baja de compatibilidad y nunca llega a ojos de un reclutador. El formato Europass, por ejemplo, es notoriamente problemático; según análisis de expertos en recursos humanos, su diseño ineficiente a menudo resulta en documentos de 3 o 4 páginas que los ATS procesan con dificultad.

Tu objetivo no es impresionar con el diseño, es ser legible para la máquina. Esto significa volver a lo básico: un documento de una sola columna, con secciones claras (Resumen, Experiencia, Educación, Habilidades), tipografías estándar (Calibri, Arial, Times New Roman) y sin elementos gráficos. El formato más seguro suele ser .docx, ya que algunos ATS antiguos tienen problemas para leer PDFs, especialmente si se han guardado como imagen. La clave es la coincidencia de palabras clave. El ATS compara tu CV con la descripción de la oferta. Si la oferta pide «gestión de redes sociales» y tú pones «community management», puede que no lo reconozca. Debes usar los términos exactos de la oferta.

Para asegurarte de que tu CV no sea una víctima más del filtro robótico, es crucial realizar una auditoría técnica antes de enviarlo. Se trata de un checklist de supervivencia en la era de la automatización.

Plan de acción: Optimiza tu CV para los robots ATS

  1. Formato simple: Utiliza un procesador de texto como Word o Google Docs. Guarda una versión en .docx y otra en PDF (si se permite), pero prioriza el .docx. Cero columnas, tablas o gráficos.
  2. Palabras clave: Analiza 3-4 ofertas del puesto que deseas. Extrae las palabras clave y habilidades que se repiten (ej: «SEO», «Google Analytics», «trabajo en equipo», «metodologías ágiles») e intégralas de forma natural en tu CV.
  3. Secciones estándar: Usa encabezados claros y predecibles que el ATS pueda identificar sin error: «Experiencia Profesional», «Educación», «Habilidades», «Idiomas».
  4. Evita abreviaturas: No uses acrónimos que un sistema internacional no pueda entender. En lugar de «TFG» o «ADE», escribe «Trabajo de Fin de Grado» y «Administración y Dirección de Empresas».
  5. Revisión final: Un solo error ortográfico puede ser penalizado por el ATS, reduciendo tu puntuación de compatibilidad. Pasa el corrector y pide a otra persona que lo lea.

Cómo hacer contactos profesionales si te da vergüenza ir a eventos de networking?

El consejo «haz networking» es el más repetido y, para muchos, el más paralizante. La idea de ir a un evento lleno de desconocidos, con una copa en la mano y la presión de tener que «venderte», es la pesadilla de cualquier persona introvertida. La buena noticia es que el networking de traje y tarjeta de visita está obsoleto. Las conexiones más valiosas hoy en día se construyen de forma más sutil, auténtica y, a menudo, digital.

La estrategia más efectiva para perfiles junior es el «micro-networking digital». No se trata de agregar a 500 personas en LinkedIn, sino de construir relaciones genuinas con 5 ó 10 profesionales clave en tu sector de interés en España. La clave es dar antes de pedir. En lugar de enviar una solicitud de conexión fría, identifica a estas personas y empieza a interactuar con su contenido. Un comentario inteligente en su publicación («Interesante perspectiva sobre X. ¿Has considerado cómo podría aplicarse a Y?»), un «me gusta» a su artículo o compartir su contenido con tu propia reflexión te pone en su radar de forma no intrusiva. Después de una o dos semanas de interacción genuina, tu solicitud de conexión personalizada tendrá un contexto y una tasa de aceptación mucho mayor.

Profesional joven trabajando en su red de contactos desde un espacio tranquilo con laptop

Esta aproximación convierte el networking de un evento de alto estrés en un hábito diario de 15 minutos. Un estudio de caso informal entre profesionales españoles en LinkedIn revela que esta técnica de «calentamiento» previo genera una tasa de respuesta un 40% superior a la del contacto en frío. Estás demostrando un interés real en su trabajo, no solo en lo que pueden hacer por ti. Y eso, en el mundo de las relaciones profesionales, lo es todo.

Si aún prefieres el contacto cara a cara pero te abruman los eventos corporativos, existe una alternativa mucho más efectiva: el networking cultural. Como bien apunta una experta en desarrollo profesional en Madrid, los entornos creativos son menos intimidantes y fomentan conversaciones más auténticas.

En lugar de eventos corporativos, asiste a inauguraciones en galerías de Malasaña o conferencias en La Casa Encendida – el networking cultural es menos intimidante y más auténtico.

– María González, Gestora cultural y consultora de desarrollo profesional en Madrid

En estos espacios, la conversación no gira en torno a «¿a qué te dedicas?», sino a ideas, arte y cultura. Es una forma mucho más natural de conocer gente interesante de diversos campos. Nunca sabes si la persona con la que comentas un cuadro es el director de marketing de la empresa de tus sueños. Se trata de construir una red basada en intereses compartidos, no en transacciones.

Qué sectores contratan a mayores de 40 años sin experiencia previa?

Aunque el foco principal de esta guía es el talento joven, la pregunta sobre las oportunidades para perfiles senior sin experiencia directa en un sector es cada vez más relevante en un mercado laboral en constante transformación. La respuesta corta es que sí, existen, y operan bajo un principio similar al que aplicamos a los recién graduados: la transferencia de habilidades y el valor de una perspectiva externa.

En España, hay sectores con un déficit de talento tan agudo que están abiertos a formar a personas desde cero, valorando más la madurez, la responsabilidad y las soft skills consolidadas que la experiencia técnica específica. El sector tecnológico es el ejemplo más claro. Con un crecimiento de especialistas TIC que evidencia un enorme gap de talento, muchas empresas de ciberseguridad, análisis de datos y desarrollo de software prefieren contratar perfiles senior de otros campos (como la banca, el derecho o la gestión) y formarlos internamente. Valoran su capacidad de gestión de proyectos, su visión de negocio y su inteligencia emocional, competencias que un junior tarda años en desarrollar.

Otro ámbito es el de la economía plateada y los cuidados (Silver Economy). Empresas que desarrollan servicios y productos para la tercera edad buscan activamente a profesionales mayores de 40 ó 50 años. Su experiencia vital no es un hándicap, sino una ventaja competitiva: entienden al cliente final de una manera que un joven de 25 años no puede. Aquí, la empatía y la experiencia de vida son las credenciales más importantes.

Finalmente, la transición ecológica abre otra puerta. Sectores como la gestión de residuos, las energías renovables o la consultoría de sostenibilidad necesitan profesionales capaces de entender la regulación, negociar con administraciones y gestionar equipos. Un ex-directivo de logística puede reciclarse en un experto en cadena de suministro verde, aplicando su conocimiento del «cómo» a un nuevo «qué». La clave para estos perfiles es la misma que para un joven: identificar sus habilidades transversales (liderazgo, negociación, resolución de problemas) y presentarlas no como experiencia en un sector obsoleto, sino como activos estratégicos para un sector emergente.

Cómo conectar con la escena artística de la ciudad de acogida sin ser un turista?

Para aquellos que buscan oportunidades en sectores creativos (diseño, publicidad, arte, cultura), la estrategia de networking tradicional se queda corta. Tu portfolio es importante, pero tu integración en el ecosistema cultural local lo es aún más. Los reclutadores de estos campos no solo buscan talento, buscan a alguien que «respire» la cultura de la ciudad, que entienda sus códigos y que forme parte de su tejido creativo. Ser un mero espectador o turista cultural te deja fuera del círculo de confianza donde surgen las mejores oportunidades.

La clave es pasar de consumidor a participante. No se trata solo de visitar el Reina Sofía o el MACBA; se trata de infiltrarse en la escena «underground», donde nace la verdadera vanguardia. Esto implica un trabajo de investigación y una actitud proactiva para mapear los nodos de la red cultural no oficial. Hablamos de espacios autogestionados, colectivos artísticos, librerías independientes y pequeños festivales que no aparecen en las guías turísticas.

Integrarte no es una actividad de un fin de semana, es un proyecto a medio plazo. Implica cambiar tus hábitos de ocio y consumo cultural. En lugar de ir al cine comercial, busca una proyección en la Cineteca. En vez de comprar libros en una gran superficie, hazte cliente habitual de una librería de barrio y asiste a las presentaciones de autores. Ofrecerte como voluntario en un festival de música o cine (como Sónar o PhotoESPAÑA) te da acceso «detrás de las cámaras» y te permite conocer a los organizadores y artistas de forma natural.

Aquí tienes una hoja de ruta práctica para dejar de ser un turista cultural y empezar a ser un agente activo en la escena española:

  • Mapea los espacios clave: Identifica centros sociales y culturales autogestionados como La Tabacalera en Madrid o Can Vies en Barcelona. Son el corazón de la escena alternativa.
  • Sigue a los colectivos en redes: Muchos eventos, exposiciones y convocatorias no se publican en grandes medios. Sigue a colectivos artísticos, fanzines y agitadores culturales locales en Instagram para enterarte de lo que realmente se cuece.
  • Haz voluntariado estratégico: Colaborar en grandes festivales como Sónar, Primavera Sound o ARCOmadrid te ofrece una acreditación y la oportunidad de hacer contactos de alto nivel en un contexto de trabajo.
  • Frecuenta los puntos de encuentro: Las librerías independientes como La Central o Tipos Infames no son solo tiendas, son centros culturales. Asiste a sus eventos, presentaciones y clubes de lectura.
  • Asiste a inauguraciones («vernissages»): Los jueves y viernes por la tarde, los barrios artísticos como Malasaña en Madrid, El Carmen en Valencia o Poblenou en Barcelona bullen de inauguraciones en galerías. La entrada es libre y es el mejor lugar para conocer a artistas, curadores y galeristas.

Lo esencial a recordar

  • Tu objetivo no es conseguir un trabajo, es recibir una oferta. Esto cambia tu mentalidad de solicitante pasivo a socio estratégico.
  • La experiencia no está en los contratos, está en los problemas que has resuelto. Aprende a narrarlos usando la metodología STAR.
  • Antes de que te vea un humano, te verá un robot. Optimiza tu CV para los sistemas ATS con un formato simple y palabras clave de la oferta.

FP Dual: te pagan por aprender o es mano de obra barata encubierta?

La Formación Profesional (FP) Dual se presenta en España como la solución mágica a la desconexión entre el sistema educativo y la empresa. La promesa es irresistible: aprendes un oficio con un pie en el aula y otro en una empresa real, y además recibes una remuneración por ello. Para muchos jóvenes, es la vía más rápida y práctica hacia el empleo. Sin embargo, como reclutador, he visto las dos caras de la moneda: desde historias de éxito rotundo a casos que rozan la explotación laboral. La línea entre ser un aprendiz y ser mano de obra barata encubierta es, a veces, peligrosamente delgada.

Un buen programa de FP Dual es un acelerador de carrera sin igual. En sectores como el industrial, el tecnológico o el sanitario, donde los protocolos son claros y la inversión en formación es alta, la tasa de inserción laboral post-aprendizaje puede superar el 85%. En estos casos, el estudiante tiene un tutor de empresa dedicado, un plan formativo detallado que asegura la rotación por diferentes áreas y una remuneración justa. La empresa invierte en el aprendiz con la intención real de contratarlo a futuro, viéndolo como un talento a moldear.

El peligro surge en sectores con alta rotación y márgenes ajustados, como la hostelería o el comercio minorista. Aquí, algunas empresas utilizan la figura del aprendiz para cubrir puestos estructurales a bajo coste. Las señales de alerta son claras: no existe un plan formativo por escrito, el tutor está siempre «demasiado ocupado», y las tareas son repetitivas y de bajo valor añadido (por ejemplo, un aprendiz de comercio que solo está en la caja). En estos casos, el componente «formativo» es una excusa, y el estudiante termina su contrato con una experiencia laboral pobre y pocas habilidades transferibles.

Antes de aceptar una oferta de FP Dual, debes actuar como un investigador. No te dejes deslumbrar por el nombre de la empresa. Tu misión es discernir si es una oportunidad de aprendizaje genuina o una trampa. La siguiente tabla te ayuda a identificar las luces y sombras según el sector.

FP Dual en España: Sectores con mejores y peores condiciones
Sector Tasa inserción laboral Condiciones formativas Señales de alerta
Industrial/Tecnológico Alta (aprox. 85%) Plan formativo estructurado, tutor asignado Empresas con alta rotación de aprendices año tras año
Hostelería Media (aprox. 60%) Muy variable según la empresa Ausencia de plan formativo escrito, tareas repetitivas sin progresión
Sanidad Alta (aprox. 75%) Protocolo muy supervisado y regulado Asignación de responsabilidades sin la supervisión adecuada
Comercio Media (aprox. 65%) Depende mucho del convenio y del tamaño de la empresa El aprendiz solo realiza funciones de venta directa o reposición

Entender si una oferta de FP Dual es una oportunidad real o una trampa requiere un análisis crítico previo a la firma del contrato.

Ahora que has decodificado las reglas no escritas del mercado, la pelota está en tu tejado. Aplica estas estrategias no como una lista de tareas, sino como un cambio de mentalidad. Empieza hoy a transformar tu perfil de un documento pasivo a una campaña de marketing activa sobre tu potencial.

Preguntas frecuentes sobre Cómo destacar en una entrevista de trabajo si no tienes experiencia previa?

¿Existe un plan formativo detallado por escrito?

Sí, y es una exigencia no negociable. Una oferta de FP Dual seria debe ir acompañada de un documento que detalle los objetivos de aprendizaje, las competencias a adquirir, el calendario de rotaciones por diferentes departamentos y los métodos de evaluación. Si la empresa duda en proporcionártelo, es una señal de alerta máxima.

¿Quién es el tutor de empresa y qué experiencia tiene?

La legislación española exige que el tutor de empresa sea un profesional cualificado del área donde te formas, con al menos 3 años de experiencia en ese campo. No puede ser cualquier empleado. Pide conocer a tu tutor durante el proceso de selección y pregúntale sobre su experiencia y cómo planea tu seguimiento.

¿Puedo hablar con aprendices actuales o pasados?

Absolutamente. Esta es la mejor forma de obtener una visión real de la cultura de la empresa. Una compañía transparente y orgullosa de su programa de FP Dual te facilitará el contacto sin dudarlo. Si ponen excusas o lo evitan, es probable que tengan algo que ocultar sobre las condiciones o el ambiente de trabajo.

Escrito por Dra. Silvia Requena, Consultora de carrera científica y desarrollo profesional, ex-investigadora del CSIC con un doctorado en Biología Molecular. Especializada en financiación de I+D (FPU/FPI), empleabilidad post-académica y reskilling para mayores de 40.